DECLARACION DEL CENTESIMO PLENARIO NACIONAL DE SECRETARIOS GENERALES DE LA ASOCIACION BANCARIA

LA REALIDAD LO DEMANDA. ES NECESARIA UNA REFLEXION.

El martes 11 de diciembre, ha sesionado el Centésimo Plenario Nacional de Secretarios Generales de la Asociación Bancaria. Previamente – una vez más – nos trasladamos en manifestación, acompañado por el Plenario de Delegados Generales de la Seccional Buenos Aires, a repudiar al Gobierno de Tucumán por la persecución policial, reconocida en sede judicial, que hace al Secretario General de la Asociación Bancaria, Cro. Eduardo Bourlé, e insistir en el reclamo de devolución de los fondos de la Caja Popular de Ahorros de esa provincia, arbitrariamente puestos a disposición del Gobierno, descalzándola y limitando su operatoria, así como de su normalización institucional.

Como expresión del debate y amplia participación que siempre fundan las decisiones que adoptamos en representación de nuestros compañeros bancarios, creemos oportuno ratificar nuestra posición ante los problemas que preocupan a los trabajadores y una nueva apertura de las negociaciones paritarias para renovar el acuerdo salarial que vence el próximo 31 de Diciembre.

Es natural que señalemos el mérito de los gobiernos que, desde 2003, han garantizado el funcionamiento de este imprescindible instrumento de la Democracia,  a la par que sostenemos que su funcionamiento ha de ser libre y responsable. Nuestra posición en esta negociación paritaria, como en todas, se basa en la preservación del poder adquisitivo de nuestros salarios, la evolución de los precios de los bienes y servicios imprescindibles para cubrir las necesidades de nuestras familias, y –como corresponde – la multiplicación, año tras año, de las ganancias de las entidades financieras.  

Esto último nos hacer recordar que sigue sin reconocerse nuestro derecho constitucional a la participación en las utilidades y subsiste, desconociendo ese derecho, el despojo de la contribución sobre las rentas de los bancos que se destinaba no sólo a nuestros servicios sociales, sino a todo el sistema solidario de salud (Art. 17, inc. F Ley 19322), cuestión en la que estamos privados de Justicia.

Sabemos que al hacerlo también ayudamos a consolidar el camino de crecimiento emprendido hace casi una década. Es no sólo nuestro derecho, sino nuestra obligación sindical y personal. De la misma manera que es derecho y obligación de nuestros compañeros jubilados requerir a la Justicia que garantice una correcta liquidación de sus haberes, sin que su acción pueda ser confundida con la actitud de usurero alguno.

No por ello ignoramos las repercusiones del quebranto originado en una demencial especulación financiera, en la locura de “crear dinero a partir del dinero”, con la consecuente  crisis de las economías desarrolladas, sobre nuestra economía.  No quepa ninguna duda que nuestro objetivo es que nuestro país supere exitosamente esas repercusiones, promoviendo una norma elemental de equidad: quienes más ganan más deben aportar para la consolidación económica de la Nación.

Por lo mismo volvemos a insistir en la necesidad de las reformas financiera y tributaria, aún postergadas. Si bien no podemos desconocer que a la luz de una positiva reforma de la Carta Orgánica del Banco Central existe un esfuerzo orientador del crédito hacia la economía real, éste no resulta suficiente para superar las conductas especulativas y el afán por la ganancia fácil propia de un paradigma empresario restringido a una visión cortoplacista. Es patente la necesidad de una reforma financiera, legislativa y real, confirmando el carácter de servicio público de la actividad. A la par,  no sólo por la falta de actualización del mínimo no imponible del impuesto a las ganancias, o porque éste no corresponde a los ingresos salariales que tienen carácter alimentario, sino también porque más injusto aún es que las familias con ingresos inferiores al salario mínimo vital y móvil paguen un elevado impuesto al valor agregado sobre todos sus consumos, mientras, por citar un ejemplo, la renta financiera no lo hace, subsiste una multimillonaria fuga de capitales, casi el 40% de la economía está en negro con un 35% de los trabajadores en situación de fraude laboral, con una intolerable evasión o elusión de impuestos que, no es ocioso recordarlo, involucra a los bancos que no pagan las horas extras o incurren en irregularidades en las liquidaciones salariales.

Al referirnos a la conducta de los bancos, no podemos dejar de señalar ejemplos de irresponsabilidad empresaria, con despidos absolutamente injustificados, no pago de las horas extras por montos que equivalen a miles de puestos de trabajo y desconocimiento de muchos de nuestros derechos. Tal el caso de los Bancos Hipotecario, Citi y HSBC. En este punto, al respaldar las medidas adoptadas en distintas seccionales, advertimos que si estas entidades no cambian su conducta ahora y pretenden amargar el fin de año de familias bancarias, habremos de adoptar medidas de acción directa sobre ellos en el ámbito nacional.

Lo haremos con la misma contundencia conque el 20 de noviembre cumplimos masivamente el Paro General de la CGT, el atraso del mínimo no imponible, la negación de la asignación por hijo y la situación de nuestros jubilados. Claro que lo hicimos tras un adecuado debate en el Consejo Directivo de la CGT, respetando las decisiones orgánicas tal como se practica en la Asociación Bancaria. Y cumplimos ese Paro, no contra el esquema o modelo económico vigente desde 2003, sino por su profundización. Pero, por supuesto, no participamos ni vamos a participar de decisiones adoptadas sin el correspondiente debate orgánico o que puedan confundirse con intereses partidistas, o que involucren a sectores que apuestan a la fragmentación del movimiento sindical.

Esas son las razones por las que a la par que ratificamos nuestra pertenencia al Consejo Directivo de la CGT legítimamente electo el 12 de julio, no participaremos de la convocatoria que se realiza para el próximo 19 de diciembre.

Al adoptar esta decisión, hemos resuelto ratificar nuestra voluntad y disposición a superar confusiones y desencuentros en el movimiento sindical, en el campo nacional y popular al que pertenecemos. La realidad lo demanda y es necesaria una reflexión.

Es más, aún sabiendo que no existe una convocatoria a un necesario acuerdo o pacto social, para consolidar los avances económicos y sociales de los últimos años, creemos oportuno señalar que estamos dispuestos a participar en un esfuerzo superador de evidentes diferencias, haciendo expresa aclaración que tal  deseable pacto o acuerdo no debe restringirse a la cuestión precios y salarios. Al contrario, un pacto social debe dejar expresamente sentado qué destino tiene el esfuerzo de los trabajadores que representamos en caso de  suscribirlo, qué garantías hay de que no seguirán las conductas desaprensivas en materia de precios, cómo se concretarán las reformas imprescindibles como la financiera, la tributaria, la legislación en materia de inversiones extranjeras y recursos naturales, una reforma real de la legislación en materia de riesgos del trabajo impidiendo que el riesgo de vida siga siendo un negocio, cómo se mejorará la situación de los excluidos de un trabajo digno, o de nuestros compañeros jubilados, como se asiste a la salud del Pueblo Trabajador, cómo se distribuye la riqueza y también los esfuerzos. No queremos retroceder, queremos avanzar.

Por último, atento a las citadas conductas empresarias y a la demora en constituir la mesa formal de negociación paritaria declaramos el estado de Alerta y Movilización, autorizando al Secretariado General Nacional a adoptar, en caso de corresponder, las pertinentes medidas de acción directa.

Buenos Aires, Diciembre de 2012

PLENARIO NACIONAL DE SECRETARIOS GENERALES DE LA ASOCIACION BANCARIA

SECRETARIADO GENERAL NACIONAL

Sergio Palazzo

Secretario General

Andrés Castillo, Carlos Cisneros, Claudia Ormachea, José Lupiano, Cristina Maino, Patricia Rinaldi, Walter Rey, Gustavo Díaz, Carlos Irrera, Liliana Lafauci, Eduardo Negro, Lisandro Aguirrezabal, 

Juan Pallo, Luis Ortega, Aldo Acosta, Stella Mena, Rosa Sorsaburu, Eduardo Berrozpe

SECRETARIOS GENERALES DE SECCIONALES

Azul, José Iturralde; Bahía Blanca, Néstor Barral; Buenos Aires, Alejandra Estoup; Catamarca, Héctor Melo; Chascomús, Ernesto Latorre; Chilecito, Raúl Ramos;Chivilcoy, José M. Giorgetti; Comodoro Rivadavia, Jorge R. Uliarte; Concepción del Uruguay, Adalberto Sosa; Concordia, Ramón De León; Córdoba, Raúl Ferro;Corrientes, Juan E. Lescano; El Trébol, Heraldo E. Picatto; Formosa, César Cerdan; General Pico, Adolfo Pernas; General Roca, Jorge Rodríguez; General Villegas,Carlos Caballín; Junín, Abel Bueno; La Plata, Salvador Villano; La Rioja,Angel Gómez; Mar del Plata, Miguel A. Guglielmotti; Marcos Juárez, Juan Carlos Petta;Mendoza, Alfredo Aruani; Necochea, Juan D. Marchueta; Neuquén, Francisco Melo; Paraná, Juan Carlos Navarro; Paso de los Libres, Héctor Waldovino; Pergamino,Hugo Elías; Posadas, José Ruiz Moreno; Presidente R.S. Peña, Arnaldo González (Int.); Rafaela, Jorge Romera; Reconquista, Raúl Castaño; Resistencia, Rubén Rufino; Río Cuarto, Osvaldo Giordano; Río Gallegos, Jorge Peraggini; Rosario, Jorge R. Rodríguez; Salta, Carlos Rodas; San Francisco, Francisco Muratore; San Juan, Mario Matic; San Luis, Francisco Rotondó; S. M. de Tucumán, Eduardo Bourle; San Rafael, Ricardo Gatica; S. S. de Jujuy, Jorge Cabana Fusz; Santa Fe, Claudio Girardi, Santa Rosa, Raúl Ibáñez; Sgo. del Estero,Ramón Canceco; Tandil, Luis E. Barandiaran; Trelew, Walter Rey (Int.); Ushuaia, Víctor Noia; Venado Tuerto, Ricardo Mestre; Viedma, Rodolfo Cufré; Villa María, Luis A. Juárez; Villa Mercedes, Amadeo Borges Diniz.